Buenos días. Odio los lunes.
Dicho esto, comenzamos.
(Ya sé que es martes, pero tenía que empezar con mi frase. Me hacía ilusión, oye)
Voy a intentar retomar el blog por fin, después de tres meses, me seguirá leyendo alguien?
Tengo tantas cosas que contaros… Iré por partes y desde el principio de los tiempos, como siempre.
Para empezar, sigo sin correr. Estoy a la espera de hacerme unas plantillas voladoras. Bueno, voladoras no sé si serán, pero podré volver a correr a mi velocidad tortuga normal, espero. Ya os iré contando.
El veranito, aún sin correr, ha dado mucho de si. Sin parar por casa, como mandan los cánones, no? xD
Quedó claro que no valgo para nada jugando al baloncesto:
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Estilazo, hoyga... |
Volví a Portugal, esta vez al Algarve, a que me achuchara Silvia:
Y salí muchísimo con los marines, y jugué a los bolos con el drugo, y me harté de gintonics por Lavapiés y Malasaña con mi amigo Fran.
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Con Esteban, mi papi adoptivo xD |
Y cumplí un sueño, subir a una carroza en el orgullo gay con mi amigo Nacho!
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Barbanarama, la mejor carroza con diferencia! |
Y vi a Scorpions en directo!
Y me fui a los San Fermines en un genial ataque de locura.
Y viví una intensa historia de amor con triste final, que me ha dejado un poco (bastante) tocada. Menos mal que tengo la mejor familia y los mejores amigos del mundo.
Pero lo más importante… He tenido el viaje de mi vida.
Kenia.
Ay, Kenia.
Me dio el venazo, amigas. No tenía plan, tenía dinero, tenía ganas de irme sola a algún sitio. Y lo vi: “vacaciones solidarias”. Tres semanas en una isla perdida, en un proyecto con mujeres y niños que tenía muy buena pinta.
Destino: Lamu.
Y para allá que me fui.
2016, el año de las locuras.
Haré un post aparte con el viaje, pero resumiendo os diré que he pasado uno de los meses más felices de mi vida, me llevé un trocito de África en el corazón y siete amigas locas, tan locas como yo, o casi.
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Su poquito de floting! |
Ya de vuelta a la cruda realidad, después de cuatro días de descanso en la playa, bien mimada por mis papis, tengo que poner (otra vez) orden en mi vida, en mi dieta y mis entrenamientos.
Y en mi blog.
Así que empiezo hoy, amigas, de nuevo, a contaros mi vida y milagros, a ver si me seguís aguantando y seguís apoyándome como siempre habéis hecho.
Para empezar ayer, como toma de contacto con el gym, me fui a Spinning.
Ay mama!
Clase con Mauro (nuevo en el gimnasio, ergo en el blog también). Por fin! Por fin un monitor que vive la música electrónica tanto como yo!
Ha sido genial, en serio. Una clase muy bien preparada, con musicón del bueno (ouyeah) y un profe entregado. 10/10.
Eso si, salí muerta. Casi me desmayo al bajarme de la bici. Qué mareo! Entre el calor, un catarro que llevo arrastrando desde hace una semana casi, y que estaba deshidratada perdida, casi me da un aypordior.
Lo mejor es que por fin esta noche he podido dormir. Que llevaba desde el miércoles sin pegar ojo. Ya pensaba que tendría que empastillarme ☹
Pero no, no hay nada que no cure el deporte. Menos mal.
Del tema de la dieta… mejor no os cuento nada aún. Bueno, os puedo adelantar que perdí algo más de siete kilos en Kenia, de los cuales he recuperado más de la mitad, putabidatt… pero bueno, en general el balance del verano, con todos los excesos y la falta de ejercicio, no está nada mal.
Hoy tengo médico (revisiones rutinarias y tal) pero después voy al gym, hombre ya! Que nos han puesto yoga! Ouyeah!
Os acordáis de la Flor yogui? Tenéis mis experiencias aquí y aquí.
Vamos, que si no llego, iré aunque sea a subirme un rato a la elíptica. Tengo que volver a coger la rutina de ir al gym a diario.
Bueno, a diario no, que el jueves he quedado… pero ya sabéis que los jueves me suelo escaquear xD
Mañana os sigo contando, si sobrevivo! Y contadme vosotras, que comentar es gratis!
Muuuuuuak!
Flor.